La inspiración es desde fuera y la motivación desde adentro:
Tu puedes motivarte e inspirar a los demás.
¿Qué es la motivación?
La motivación es un estado interno que activa, dirige y mantiene la conducta.
La palabra “motivación” deriva del latín motivus o motus, que significa “causa del movimiento”
¿Qué tipos de motivación existen?
La motivación puede dividirse en motivación interna o motivación externa.
Veamos de que tratan…
Motivación Interna
La motivación interna viene desde dentro nuestro. Está impulsada por el interés o el placer de realizar una tarea en sí misma y no depende de incentivos o estímulos externos.
“Lo hago por el placer que me da hacerlo”
Una característica de este tipo de motivación es que es sostenible en el tiempo, dado que la fuente que alimenta la motivación nace de vos mismo.
Motivación Externa
Por otro lado, la motivación externa, si depende de incentivos externos, y se enfoca principalmente en la realización de una tarea como un medio para alcanzar un fin (osea el incentivo externo).
Algunos factores de motivación externos pueden ser:
- El dinero
- Viajes
- Premios
- Coches
- Ascensos en el trabajo
- Bienes materiales
A diferencia de la motivación interna, este tipo de motivación, no es sostenible en el tiempo, dado que proviene de un incentivo externo, una vez que ese incentivo desaparece, la motivación también.
¿Qué es la desmotivación?
Lo opuesto a la motivación es la desmotivación y tiene que ver justamente con la falta de motivos.
La desmotivación, es el obstáculo al que se enfrentan muchísimas personas en el proceso de conseguir sus objetivos. Si no tienen la suficiente motivación para realizar las acciones necesarias para conseguir sus objetivos, nunca los van a conseguir.
Continúa leyendo para aprender cómo vencer a la desmotivación…
¿Qué es la automotivación?
La automotivación, es la capacidad de motivarse a uno mismo.
Es una cualidad imprescindible, ya que no podemos estar constantemente dependiendo de qué factores externos a nosotros nos motiven para poder hacer las cosas que queremos o necesitamos hacer.
¿Qué sucedería si estos factores externos nunca aparecieran?
Es por esta razón, que es necesario entender, cómo funciona la motivación y aprender a automotivarse, para poder generar la motivación necesaria cada vez que la necesitemos.
La solución a la desmotivación: El principio del progreso
Este principio, dice que entre todas las cosas que podemos hacer para motivarnos la más relevante y efectiva tiene que ver con realizar pequeños progresos, ya sea en nuestra vida profesional o personal.
El progreso diario (incluso los pequeños logros) marcan una gran diferencia en cómo nos sentimos.
Por ejemplo:
¿Cómo te sientes al haber realizado todas las tareas del día?
¿Cómo te sientes cada vez que logras un avance en tus objetivos?
¿Cómo te sientes al ver los primeros progresos en tu cuerpo desde que comenzaste a hacer ejercicio?
La acción no sólo es efecto de la motivación, también es causa de ella.
La mayoría de las personas solo toma acción si se siente motivada, asumiendo así la siguiente fórmula:
Motivación ➡ Acción.
Pero en realidad esto es un bucle que se retroalimenta constantemente:
Motivación ➡ Acción ➡ Motivación ➡ Acción ➡ Motivación ➡ Acción ➡ Motivación ➡ Acción ➡ Motivación ➡ Acción ➡ Acción ➡ Motivación ➡ Acción ➡ Motivación ➡ Acción…
La acción (que genera pequeños progresos) es la que produce también la motivación. Por eso, si sientes que no estás lo suficientemente motivado como para hacer lo que quieres o necesitas hacer, solo basta con que te pongas a hacer algo y la motivación aparecerá. Pero no te quedes sentado a que está llegue, porque puede que nunca lo haga.
Recuerda:
Toma acción y la motivación aparecerá.